jueves, 24 de abril de 2014

Arte con letras.

Más que las tipografías en sí, lo que me gusta es lo que algunos artistas consiguen hacer con ellas.






Mi Motiva 2014.

Hablando claramente tengo que decir que fue mucho menos de lo que me esperaba. Llevaba dos años intentado venir a estar jornadas y después de lo visto este año tampoco creo que fuera para tanto. Puede que no pillara el mejor año, aunque haya habido conferencias que valieran la pena, a mi me lo habían pintado mucho mejor y más entretenido.

Son unas jornadas de diseño, que se muestran como tal, no que todo queda en las escuela de arte. Hay que darlo a conocer y hacer más talleres que para eso estamos, para aprender diseño, no para verlo, que verlo ya lo vemos todos los días y por todas partes. Que no digo que no haya conferencias, que son muy buenas muchas, pero... me falta eso, un poco de chispa, un poco de diseño.



Y acabé en Asturias.

En realidad queja hacia los estudios no tengo ninguna, me gusta lo que estudio y disfruto con ello. Empecé por esta rama en los estudios de Bachillerato y he acabado en Asturias, lo que creo que me va a dar mi futuro.

Disfruto estresándome con cada trabajo, disfruto con cada grito que me gustaría dar cada vez que tengo que retroceder en algo, disfruto poniéndole un poco de color al mundo y por supuesto disfruto con el placer que me da estar orgullosa de cada proyecto que entrego.

Todo podía organizarse mejor, y ser llevado de otra manera pero... lo hecho, hecho está y hay que aprender de lo que se hace para mejorar.

Lo que tengo muy claro es que no cambiaría lo que las escuelas de artes me han proporcionado, ese buen rollo que siempre se transmite, por una universidad que es solo entrar por la puerta, tomar apuntes y salir por la puerta.



Ilustración de Carne Griffiths

Cada parte cuenta.

Otro proyecto a desarrollar fue el de un cadáver exquisito tipográfico. Donde teníamos que crear el cadáver partiendo o de diferentes tipografías o de una misma familia.

Buscamos tipografías que concordaran en el ancho de las astas o que tuvieran una unión en común. Mi cadáver va partido a la mitad con lo cual tuve que buscar diferentes tipografías de la a que concordaran en lo máximo posible para que aunque hubiera dos partes diferentes se distinguiera esa a minúscula a de nuestro abecedario. 







Al rico queso!

Tuvimos que crear una tipografía basada en el queso. Después de ver miles que se basan en crearlos a bases de la cuña del queso o como si fuera un queso cheddar, opté por coger el queso entero y simular como si se viera desde arriba, y quitar el trozo de queso formando la letra como si alguien se lo hubiera comido, que para eso está tan rico (como dato). Quedándome así una tipografía hecha a base de círculos y jugando con las partes negativas de las letras.

Muestro unas fotos del proceso de creación y del pangrama usado para ver que la tipografía puede funcionar.












Del papel a la pantalla.

Muchas veces leer en pantalla nos resulta incómodo, cansado y a veces ni terminamos de leer lo que empezamos. Esto es causado porque no es lo mismo leer sobre papel impreso que en pantalla. Para ello hay que ser cauteloso tanto con la tipografía (claramente) como con el color y el tamaño.

Se necesita contraste entre el fondo y el color de la letra, lógicamente como claro ejemplo tenemos letra negra sobre fondo blanco, pero también pueden funcionar la gama de claros sobre oscuros. En el caso contrario, el fondo oscuro y la letra clara, es cierto que leer se lee perfectamente pero al ser mayor el contraste, al pesar más el fondo que la letra, terminamos cansándonos y forzando la vista.

El tamaño que recomiendan para pantalla está entre 11 y 14 puntos para el texto y si usamos títulos entres 14 y 20 puntos, tamaños con los que estoy totalmente de acuerdo.

Pensemos siempre en la legibilidad ya que lo que queremos es que la gente se entere de lo que estamos anunciando en ese texto.



Primer impacto

Para mi blog quería algo sencillo, minimalista. Después de ver varios blogs de distintos autores y que trataban de distintos temas y viendo que todos, lógicamente, dan gran importancia al texto y luego a la o las imágenes que acompañaban al texto procuré ir por el mismo camino.

Algunos que mejor me funcionaron fueron estos tres:

Vogue
Lo que ellos no saben
La petite robe rousse

Después de tener mi primera entrada probé con las plantillas que traía el propio blogger, di con una sencillita, como yo quería y a partir de esta la personalicé y conseguí el aspecto que ahora se ve. El resto de las plantillas fueron estas:










El nombre es lo que cuenta.

El nombre de "tipo, tipo gorgorito" viene de la canción que usábamos en nuestra niñez para que alguien se "la quedara" para jugar a algo. La letra era:


Pinto, pinto, 
gorgorito, 
saca la vaca 
de veinticinco. 
-¿En qué lugar? 
-En Portugal. 
-¿En qué calleja? 
-En la Moraleja. 
-Esconde esa mano 
que viene la vieja.


Por similitud de sonido de las palabras "pinto y tipo" y porque algunas veces estamos tan indecisos en escoger entre una tipografía u otra que muchas veces lo hacemos a capricho, según cuadre igual que por suerte con esta canción te tocaba quedártela o no.


Por otra parte creo que es un nombre fácil de recordar, gracias a la melodía de la canción y no es un nombre que se relaciones mucho a un blog sobre tipografía por eso llamará la atención.




Ilustración de José A. González "El escondite".